Este martes por la mañana, el Gobierno nacional oficializó la disolución, transformación y fusión de 21 organismos públicos de diversas áreas, en un proceso orientado a reducir la estructura estatal y el gasto público, según lo publicado en el Boletín Oficial N° 35.702.
Esta medida impacta en dependencias vinculadas a salud, transporte, agroindustria, industria y seguridad vial, entre otras, y responde a un diagnóstico que detectó un crecimiento desproporcionado del aparato estatal, irregularidades administrativas y duplicación de funciones en varios organismos.
El Gobierno fundamenta estas acciones en un diagnóstico que detectó un crecimiento excesivo y descontrolado del personal en organismos descentralizados,
que pasó de 35.481 agentes en 2010 a 88.095 en 2024. Este aumento no
solo implica un gasto público elevado, sino también problemas de
duplicación de funciones, falta de control interno y en algunos casos
irregularidades administrativas.
Por ello, las funciones esenciales y las plantillas de personal de los organismos disueltos serán absorbidas por ministerios como el de Economía, Salud, ANMAT, y las secretarías de Agricultura, Industria y Transporte, según corresponda. Además, los bienes inmuebles y vehículos sin uso serán transferidos a la Agencia de Administración de Bienes del Estado (AABE) para su reasignación o venta, y los fondos líquidos disponibles pasarán al Tesoro Nacional.
El Ejecutivo también
instruyó a los ministerios a presentar en las próximas semanas
propuestas para adecuar las estructuras organizativas que asumirán las
competencias reasignadas, garantizando así la continuidad y calidad de
los servicios públicos.
Entre los organismos disueltos se encuentran entidades clave como:
La disolución de estos organismos se fundamentó en casos de superposición de funciones, falta de resultados concretos y, en algunos casos, irregularidades administrativas detectadas.
Además, varios organismos fueron transformados en unidades organizativas dependientes de ministerios para optimizar su gestión:
Esta medida forma parte de un plan más amplio de transformación del Estado que busca reducir el déficit fiscal, eliminar gastos superfluos y modernizar la administración pública.
Según datos oficiales, desde 1983 la cantidad de organismos descentralizados y desconcentrados creció más del 150%, con más de 111 órganos de gobierno que emplean a más de 80.000 agentes, representando casi la mitad del personal de la Administración Pública Nacional. La reestructuración busca revertir esta tendencia y promover una gestión estatal más eficiente y coordinada.