“En el discurso presidencial se tocaron la mayoría
de los temas que el sector está reclamando y que viene reclamando hace años”
comenta Ernesto “hubo una respuesta favorable por parte del gobierno”.
En cuanto a los tiempos económicos, Ernesto
afirma que el productor agropecuario se encuentra ‘ajustándose’ a esta nueva
economía, “faltan muchas cosas todavía, pero el camino iniciado es el correcto”.
El
productor patagónico durante el 2025.
“La verdad que fue bastante duro. El sector
principalmente ovino, está pasando por un problema de rentabilidad que es duro,
los costos son altísimos”.
Ernesto nos cuenta que producir en la
Patagonia difiere de lo que es producir cerca de las ciudades, “la Patagonia es
un lugar donde los costos son muy altos, incluso los salarios son mayores”.
El dólar
en relación al sector ovino.
“Nuestro principal problema en la
rentabilidad en los últimos años fue la diferencia de tipo de cambio. Hoy eso
no lo tenemos, con lo cual estamos mejor en ese tema, pero igualmente hoy los
costos en dólares han aumentado muchísimo y eso creo que es nuestro principal
problema”.
En otro punto, el ingreso de asado con
hueso en la Patagonia desde el norte, si bien en un principio se notó un
impacto, después se recuperó, “el ingreso no modificaría mucho el status
sanitario. Desde la Unión Europea se confirmaron que se siguieron haciendo
embarques de carne con hueso desde la Patagonia”.
Patagonia
con buenos resultados en la Expo Rural.
“Es digno de ver que los exponentes de la
Patagonia son realmente competitivos acá en el norte, donde está, te diría, la
punta de la genética bovina del país y de Sudamérica y, por qué no, del mundo. Y
la verdad que los productores patagónicos han logrado mostrar un nivel de
animales que están a la altura”.