En una
conferencia de prensa celebrada hoy, Sergio Clemente y Raúl Henny, directivos
del hospital regional, anunciaron su renuncia debido al desgaste laboral
acumulado tras casi dos años de gestión. "Es un trabajo muy
desgastante", señaló Clemente, explicando que la dirección del hospital
implica un compromiso constante, afectando significativamente su vida personal
y familiar.
Clemente describió
las demandas de gestionar un hospital con 1,400 empleados y 220 camas, que
ofrece prácticamente todas las especialidades médicas. "Es un hospital
antiguo, con muchos servicios y problemas de equipamiento", comentó,
mencionando situaciones recientes como la campaña para recaudar fondos tras un
brote de bronquiolitis, que permitió adquirir siete equipos de alto flujo.
Durante su
gestión, se realizaron mejoras significativas en el arancelamiento, lo que
permitió la compra de nuevo equipamiento. Clemente destacó que estas mejoras no
hubieran sido posibles sin la colaboración de la comunidad y las empresas
locales. "Nos hemos beneficiado mucho gracias al apoyo externo",
afirmó.
Raúl Henny expresó
su gratitud hacia el equipo de trabajo, especialmente a los médicos y jefes de
servicio que, a pesar de las dificultades en recursos e insumos, han mantenido
un alto nivel de atención. "Nuestro objetivo siempre fue mejorar las
condiciones de trabajo para ofrecer una mejor atención al paciente,
especialmente a aquellos sin obra social", subrayó Henny.
Ambos directivos
agradecieron al Dr. Whisky, Secretario de Salud, por su apoyo continuo, a pesar
de pertenecer a una gestión anterior. "Siempre nos hemos sentido respaldados",
aseguró Clemente, enfatizando que la confianza depositada en ellos permitió una
gestión eficaz y sin conflictos sociales significativos.
Clemente y Henny
continuarán en sus funciones hasta que se complete una transición ordenada,
asegurando que "el hospital necesita gente con mucha energía y nuevas
ideas". Aún no se han anunciado sus sucesores, pero se espera que el Dr.
Whisky visite el hospital la próxima semana para trabajar en el terreno y
posiblemente anunciar los nuevos líderes.
Ambos directivos
manifestaron que, aunque su gestión enfrentó muchos retos, se sienten
satisfechos con los logros alcanzados. "Hagas lo que hagas, siempre
parecerá poco en un hospital de esta magnitud", concluyó Clemente,
reiterando su compromiso de trabajar hasta el último día para asegurar una
transición tranquila.
Con su renuncia,
Clemente y Henny esperan que nuevos líderes puedan continuar con la misión de
proporcionar una atención de calidad y enfrentar los desafíos que demanda el
hospital más grande de la provincia.