En una final vibrante y llena de emociones, Independiente Rivadavia de Mendoza se consagró campeón de la Copa Argentina tras superar a Argentinos Juniors por 5-3 en la tanda de penales, luego de igualar 2-2 en un partido que tuvo de todo: goles, expulsiones, polémicas y un desenlace dramático.
La Lepra mendocina golpeó rápido. A los 9 minutos del primer tiempo, un cabezazo del paraguayo Alex Arce, que casi se pierde por el segundo palo, abrió el marcador para los mendocinos. Sin embargo, la primera mitad no terminaría bien para los azules: a los 45 minutos, Maximiliano Amarfil vio la segunda amarilla y dejó a su equipo con diez jugadores.
En el complemento, el partido parecía controlado hasta que, a los 62’, Sebastián Villa recuperó una pelota en su propio campo y encabezó una contra letal que terminó en el 2-0 convertido por Matías Fernández, estirando la ventaja y encendiendo la ilusión.
Pero Argentinos Juniors respondió de inmediato. Dos minutos después del gol mendocino, Alan Lescano descontó para el Bicho y volvió a poner dramatismo a la final. La intensidad se mantuvo hasta el final, y tras cumplirse los 90 minutos, el árbitro Nicolás Ramírez adicionó 14 minutos debido a las numerosas interrupciones del juego.
En pleno tiempo agregado, Independiente Rivadavia sufrió otra baja: Osella vio la segunda amarilla y la Lepra quedó con nueve jugadores para los últimos 12 minutos. Con superioridad numérica, Argentinos fue con todo y logró el empate 2-2 gracias a Erik Godoy, quien capitalizó una serie de rebotes en el área.
La definición desde los doce pasos coronó una noche inolvidable. Independiente Rivadavia se impuso 5-3 con una actuación heroica del arquero Gonzalo Marinelli, que ingresó por la lesión de Ezequiel Centurión y terminó convirtiéndose en figura.
Con este histórico título, Independiente Rivadavia se convierte en el primer club mendocino en lograr un campeonato en la era profesional y, además, aseguró su lugar en la Copa Libertadores 2026.
La semifinal de vuelta entre Deportivo Madryn y Deportivo Morón dejó mucho más que un resultado. Fue una noche marcada por polémicas, golpes y un escándalo que empañó nuevamente al fútbol argentino. El encuentro, disputado en el Coliseo del Golfo, prometía tensión desde el inicio: el “Gallito” llegaba con ventaja en el global por 1-0, tras haber ganado en su cancha, mientras que el Aurinegro necesitaba imponerse por la mínima para avanzar gracias a la ventaja deportiva.
El fútbol cuyano vive una jornada para el olvido con el descenso de Godoy Cruz de Mendoza y San Martín de San Juan, dos históricos de la región que no pudieron evitar perder la categoría
Boca se impuso 2-0 con goles de Zeballos y Merentiel, fue muy superior a River y aseguró su clasificación a la Copa Libertadores 2026.
Gimnasia aplastó 101-70 a Regatas, cerró su localía con dos triunfos y mostró una ofensiva imparable con 16 triples y gran actuación de Emiliano Toretta.
Foto: Prensa Gimnasia y Esgrima — Gimnasia revirtió un inicio adverso, tomó el control desde el segundo cuarto y terminó imponiéndose con autoridad por 84-63 ante San Lorenzo en el Socios Fundadores, con actuaciones clave de Chacón, Dato y una defensa que marcó el quiebre del partido.