En respuesta a la creciente inseguridad en
el barrio Ceferino, un grupo de vecinos ha decidido tomar medidas proactivas
para protegerse. Claudia Riveros, vecinalista del barrio, detalló las acciones
emprendidas y las demandas realizadas a las autoridades locales.
“Nos reunimos porque ya hemos sido víctimas
de diferentes delitos y hemos decidido organizarnos para adquirir una alarma
comunitaria. Además, solicitamos gestiones tanto a la sociedad cooperativa como
al municipio para mejorar la iluminación, cambiar las lámparas del alumbrado
público y remover los vehículos abandonados que los delincuentes usan para
vigilar los movimientos de los vecinos,” explicó Riveros.
En una reciente reunión con el ministro de
Seguridad, la diputada Andrea Aguilera, y el comisario de la seccional cuarta,
Alexis Gutiérrez, se presentó una nota formal exponiendo una serie de hechos
delictivos en el barrio. “Se han registrado robos de neumáticos, entradas
permanentes a las casas, y asaltos a vehículos. Incluso la parroquia San Jorge
ha sido víctima de diferentes asaltos, donde robaron elementos de liturgia y asaltaron
al padre Quín,” añadió.
Riveros destacó la labor de la comisaría de
la seccional cuarta y segunda, responsables de la seguridad del barrio, que
cubre un total de 96 cuadras. Sin embargo, subrayó la necesidad de mayores
recursos y apoyo para enfrentar la situación. “Desde febrero, hemos estado
trabajando en red para abordar estos delitos. Ahora, esperamos que el
compromiso del ministro se traduzca en acciones concretas para eliminar estos
aguantaderos y reducir la inseguridad en nuestro barrio,” afirmó.
La vecinalista también mencionó que la
inseguridad ha aumentado progresivamente debido a las ocupaciones ilegales.
“Hay lugares específicos en el barrio que se han convertido en refugios para
delincuentes que salen de la alcaldía y se alojan allí para luego delinquir.
Esto ha incrementado la inseguridad en Ceferino,” señaló.
Los vecinos piden mayor control policial y
apoyo del municipio para mejorar la infraestructura y la seguridad del barrio.
“Además de las alarmas comunitarias, necesitamos que el municipio realice la
poda de árboles para evitar que sirvan de escondite y mejore la iluminación
para disuadir a los delincuentes,” concluyó Riveros.